La bolsa de Nueva York ha comenzado la jornada con un tono optimista, impulsada por datos de inflación que han superado las expectativas de los analistas. En los primeros intercambios, el índice Dow Jones ha registrado un aumento del 0,45%, mientras que el Nasdaq ha subido un notable 1,67% y el S&P 500 ha visto un incremento del 1%. Este repunte se produce en un contexto de incertidumbre económica, donde los inversores están atentos a las fluctuaciones del mercado y a las declaraciones del presidente estadounidense, Donald Trump, sobre aranceles comerciales.
Recientemente, la inflación en Estados Unidos ha bajado a un 2,8% anual, lo que ha sido recibido como una «buena sorpresa» por los analistas, quienes esperaban un panorama más complicado. Sin embargo, a pesar de este dato positivo, el mercado sigue siendo cauteloso, especialmente después de varias sesiones de pérdidas. La volatilidad ha sido una constante en las últimas semanas, y muchos inversores se sienten inseguros ante la posibilidad de una recesión.
La jornada anterior había cerrado con pérdidas significativas: el Dow Jones cayó un 1,14%, el Nasdaq un 0,18% y el S&P 500 un 0,76%. Esta caída se debió en gran parte a la incertidumbre generada por las amenazas comerciales de Trump, quien ha insinuado la posibilidad de aumentar los aranceles sobre productos canadienses, lo que ha generado preocupación entre los operadores del mercado.
Art Hogan, analista de B. Riley Wealth Management, ha comentado que la volatilidad actual es un fenómeno habitual en el contexto económico actual. Según Hogan, la incertidumbre sobre los aranceles y otras políticas comerciales está afectando la confianza de los consumidores y, por ende, su disposición a gastar. Esto podría tener un impacto negativo en el crecimiento de las empresas estadounidenses.
Los inversores están a la espera de la publicación del índice de precios al consumidor (IPC) de febrero, que se dará a conocer antes de la apertura de la sesión del miércoles. Este dato será crucial para entender la dirección futura de la política monetaria y la economía en general. La leve recuperación del Nasdaq, impulsada por acciones de empresas como Nvidia y Tesla, sugiere que algunos sectores del mercado están comenzando a mostrar signos de fortaleza, a pesar de la incertidumbre general.
En resumen, el mercado bursátil de Nueva York se encuentra en un momento de optimismo moderado, con los inversores esperando señales claras sobre la dirección de la economía. La combinación de datos de inflación más favorables y la reacción a las políticas comerciales de Trump están moldeando el comportamiento del mercado, que sigue siendo volátil y susceptible a cambios bruscos.