Las bolsas europeas han comenzado la jornada en números rojos, reflejando una tendencia negativa que se ha intensificado en los últimos días. A pesar de las alzas en los mercados asiáticos, especialmente en China, las principales plazas bursátiles del viejo continente se ven afectadas por la incertidumbre económica y las tensiones comerciales que se han intensificado recientemente.
En la apertura del mercado, el euro se ha depreciado un 0,14%, cotizándose a 1,083 dólares. La bolsa que más ha caído es la de Milán, con una disminución del 0,24%, seguida de Fráncfort con un 0,15%, Madrid con un 0,12% y París con un leve descenso del 0,01%. Por el contrario, Londres ha sido la única bolsa que ha registrado un ligero aumento del 0,03%. El índice Euro Stoxx50, que agrupa a las empresas de mayor capitalización en Europa, también ha mostrado una caída del 0,15%.
Uno de los factores que ha influido en esta caída es la reciente amenaza del presidente de EE.UU., Donald Trump, de imponer aranceles del 200% a productos como el vino y las bebidas alcohólicas provenientes de la Unión Europea. Esta medida ha generado preocupación entre los inversores, quienes temen que pueda desencadenar una nueva guerra comercial entre EE.UU. y Europa, afectando así el comercio internacional y la estabilidad económica.
En el ámbito de la inflación, se han publicado datos preocupantes que han impactado el sentimiento del mercado. En Alemania, la inflación se situó en un 2,3% interanual en febrero, mientras que en España, el índice de precios de consumo (IPC) aumentó al 3% interanual, una décima más que el mes anterior. Este aumento se atribuye principalmente al encarecimiento de la electricidad y a un incremento en los precios de los alimentos, que han subido cuatro décimas hasta el 2,2%.
A pesar de la caída en Europa, los mercados asiáticos han tenido un desempeño positivo. El índice Nikkei de Tokio subió un 0,72%, impulsado por la debilidad del yen, lo que beneficia a los exportadores. El índice más amplio, Topix, también mostró un aumento del 0,65%. En China, el índice de referencia de la Bolsa de Shanghái subió un 1,81%, mientras que el parqué de Shenzhen registró un incremento del 2,26%.
En Wall Street, la situación no ha sido diferente, ya que el mercado cerró en rojo el día anterior, con el Dow Jones de Industriales cayendo un 1,3%, el S&P 500 un 1,39% y el Nasdaq un 1,96%. Esta caída se produjo en respuesta a las nuevas medidas arancelarias anunciadas por Trump, lo que ha generado un clima de incertidumbre en el mercado estadounidense.
En el ámbito de las materias primas, el oro ha registrado una leve caída del 0,13%, cotizándose a 2,985 dólares la onza, después de haber alcanzado récords históricos al superar los 2,990 dólares. Por otro lado, el petróleo ha mostrado avances, con el Brent aumentando un 1,04% hasta los 70,61 dólares, y el West Texas Intermediate (WTI) subiendo un 1,19% hasta los 67,38 dólares.
El bitcóin también ha tenido un buen desempeño, subiendo un 2,49% y alcanzando los 82,325 dólares. Este aumento en la criptomoneda se produce en un contexto de creciente interés por activos alternativos, a pesar de la volatilidad que caracteriza a este mercado.
En resumen, la apertura de los mercados europeos en caída refleja un clima de incertidumbre económica, impulsado por la inflación y las tensiones comerciales. A medida que los inversores siguen de cerca los desarrollos en EE.UU. y Europa, la volatilidad en los mercados podría continuar, afectando las decisiones de inversión y la confianza en la economía global.