Recientemente, la Comisión de Trabajo del Congreso de Perú aprobó un predictamen de ley que permite a los trabajadores retirar sus depósitos por Compensación por Tiempo de Servicio (CTS) hasta diciembre de 2026. Esta decisión ha generado un amplio debate sobre sus implicaciones y beneficios para la economía del país.
La CTS es un fondo que se acumula a lo largo de la vida laboral de un empleado y que se utiliza como una especie de seguro en caso de despido. Sin embargo, la situación económica actual ha llevado a muchos a cuestionar la necesidad de mantener estos fondos bloqueados. La nueva ley, que fue aprobada con el voto a favor de 14 congresistas y tres abstenciones, busca dar a los trabajadores la libertad de acceder a sus ahorros en un momento en que muchos enfrentan dificultades financieras.
Uno de los puntos más destacados de esta propuesta es que se permitirá la disposición del 100% de los depósitos de CTS hasta el 31 de diciembre de 2026. Esto significa que los trabajadores podrán utilizar estos fondos para cubrir necesidades urgentes, lo que podría inyectar liquidez en la economía y estimular el consumo interno.
Además, la ley contempla modificaciones para permitir que los trabajadores diagnosticados con cáncer o enfermedades terminales puedan retirar el 100% de su CTS y los intereses acumulados. Esta medida ha sido bien recibida por algunos congresistas, quienes argumentan que es fundamental apoyar a aquellos que enfrentan situaciones críticas de salud.
El congresista Jorge Morante, de Fuerza Popular, expresó su apoyo a la medida, sugiriendo que la libre disposición de la CTS podría ser del 50% durante el año 2025. Por su parte, Segundo Quiroz del Bloque Magisterial argumentó que esta iniciativa no solo busca ayudar a los trabajadores, sino también reactivar la economía al permitir que los ciudadanos accedan a sus recursos.
Sin embargo, la propuesta no está exenta de críticas. Algunos opositores advierten que permitir el retiro masivo de CTS podría debilitar la seguridad financiera de los trabajadores a largo plazo. La CTS fue diseñada para proteger a los empleados en caso de despido, y su acceso inmediato podría llevar a una falta de ahorro en momentos de crisis.
La discusión sobre la CTS se enmarca en un contexto más amplio de reformas laborales y económicas en Perú. La situación del empleo y la economía ha sido un tema recurrente en el debate político, especialmente en tiempos de crisis. La pandemia de COVID-19 y sus efectos económicos han puesto de relieve la necesidad de medidas que apoyen a los trabajadores y a la economía en general.
La aprobación de esta ley también coincide con otras iniciativas legislativas que buscan mejorar las condiciones laborales y económicas en el país. La Comisión de Economía del Congreso también está considerando proyectos relacionados que podrían complementar esta nueva disposición sobre la CTS.
En resumen, la reciente aprobación del predictamen de ley que permite el retiro de CTS hasta diciembre de 2026 representa un cambio significativo en la política laboral de Perú. Mientras que algunos ven esto como una oportunidad para mejorar la situación financiera de los trabajadores, otros advierten sobre los riesgos asociados con el acceso inmediato a estos fondos. La discusión sobre la CTS y su futuro continúa, y será crucial observar cómo se implementan estas medidas y sus efectos en la economía y en la vida de los trabajadores peruanos.