En el contexto de las Eliminatorias de la Copa del Mundo, Perú y Bolivia no solo se enfrentan en el campo de juego, sino que también compiten en el ámbito económico. La crisis provocada por la pandemia del COVID-19 dejó una huella profunda en ambas naciones, pero sus trayectorias de recuperación han sido notablemente diferentes. A continuación, se analizan cinco indicadores económicos clave que reflejan el estado actual y las proyecciones para 2025.
Crecimiento Económico
Ambos países sufrieron recesiones severas en 2020, con Perú experimentando una caída del 10.9% en su Producto Bruto Interno (PBI) y Bolivia una contracción del 8.7%. Sin embargo, la recuperación fue desigual. Perú logró un rebote del 13.4% en 2021, recuperando rápidamente los niveles de producción previos a la pandemia. En contraste, Bolivia creció un 6.1%, sin alcanzar una recuperación total. Entre 2022 y 2024, Perú mostró un crecimiento inestable, mientras que Bolivia continuó su desaceleración. Para 2025, se espera que Perú crezca un 2.6% y Bolivia un 2.2%, según el Fondo Monetario Internacional (FMI).
PBI per Cápita
La brecha en el PBI per cápita entre Perú y Bolivia se ha ampliado en la última década. Se proyecta que para 2025, el PBI per cápita de Perú alcance los US$8,570, más del doble que los US$4,121 estimados para Bolivia. Esta diferencia resalta las desigualdades económicas y de infraestructura que persisten, especialmente entre las áreas urbanas y rurales en Perú.
Inflación
Antes de la pandemia, ambos países disfrutaban de tasas de inflación relativamente bajas. Sin embargo, tras la crisis, Perú vio un aumento significativo, alcanzando un 8.5% en 2022, mientras que Bolivia, a pesar de mantener un tipo de cambio fijo, también experimentó un aumento en su inflación, que llegó al 3.1% en 2022. En los últimos años, Perú ha logrado controlar su inflación, bajando a un 2.4% en 2024, mientras que se espera que Bolivia enfrente una inflación de dos dígitos en 2025.
Desempleo
La informalidad laboral es un desafío común en ambos países. En 2023, Bolivia registró una tasa de informalidad del 80.8%, mientras que Perú tuvo un 71.1%. A pesar de la recuperación post-pandemia, Perú ha mantenido tasas de desempleo superiores a las de Bolivia. Para 2025, se prevé una ligera disminución del desempleo en Perú, mientras que Bolivia podría experimentar un aumento en su tasa de desempleo, alcanzando el 5.1%.
Deuda Pública
La gestión de la deuda pública presenta un contraste notable entre ambos países. Bolivia ha visto un aumento significativo en su deuda, pasando del 37.6% en 2014 al 93.9% en 2024. En cambio, Perú ha mantenido un control más estricto de su deuda, que se sitúa en un 35.3% en 2024. Esta diferencia en la gestión de la deuda refleja enfoques económicos divergentes, donde Perú se beneficia de reglas fiscales más estrictas, mientras que Bolivia enfrenta desafíos debido a la falta de credibilidad en su política monetaria.
Crecimiento Poblacional
En términos de crecimiento poblacional, Perú ha visto una desaceleración, pasando de un crecimiento del 2% a un 1% en los últimos años. Bolivia, por su parte, ha mantenido tasas de crecimiento poblacional más estables, aunque en ligera disminución. Estas tendencias demográficas son cruciales para entender las dinámicas económicas y sociales en ambos países.
Perspectivas Futuras
Los expertos coinciden en que las políticas económicas intervencionistas, como los subsidios masivos y el control estatal de la producción, pueden generar problemas a largo plazo. La solidez macroeconómica y la disciplina fiscal de Perú se destacan como factores clave para su estabilidad futura. En contraste, Bolivia enfrenta riesgos significativos debido a su creciente deuda y la falta de diversificación económica.
En resumen, mientras que Perú y Bolivia comparten desafíos económicos similares, sus trayectorias y perspectivas son marcadamente diferentes, lo que refleja no solo sus políticas internas, sino también su capacidad para adaptarse a un entorno económico global cambiante.