La inminente apertura del nuevo terminal del aeropuerto Jorge Chávez ha sido objeto de atención y preocupación debido a los problemas detectados en el sistema de manejo de equipaje. A menos de dos semanas para su inauguración, un informe reciente ha revelado que el sistema BHS (Baggage Handling System) no está completamente operativo, lo que podría afectar la experiencia de los viajeros.
Un reporte de Talma, fechado el 13 de marzo de 2025, ha puesto de manifiesto las dificultades que enfrenta el nuevo aeropuerto en su fase de pruebas. Según el documento, durante las pruebas realizadas, se identificó que varias maletas no llegaban al área de recogida, un problema que ha sido recurrente desde noviembre del año pasado. Esta situación ha generado inquietud entre las aerolíneas, que consideran que un sistema de manejo de equipaje eficiente es crucial para la operatividad del aeropuerto.
Carlos Gutiérrez, gerente general de AETAI, ha expresado su preocupación en el programa de televisión «Punto Final», señalando que la falta de funcionalidad del BHS podría resultar en retrasos en los vuelos y en la pérdida de equipaje. Gutiérrez ha enfatizado que este sistema es fundamental para la logística del aeropuerto y que, si no funciona adecuadamente, los pasajeros enfrentarán tiempos de espera prolongados y otros inconvenientes.
El informe de Talma también menciona que, además de los problemas con las maletas, se han detectado goteras en varias áreas del sistema BHS. A pesar de las alertas, hasta la fecha de la carta no se había realizado una evaluación técnica para determinar si estos problemas eran de naturaleza estructural. Gutiérrez ha cuestionado la falta de acción para resolver estos problemas, que se han arrastrado durante varios meses.
Por su parte, Sergio Ocampo, jefe de proyecto de LAP, ha defendido la posición de su empresa, argumentando que Talma podría estar interpretando erróneamente los informes. Ocampo ha explicado que el proceso de manejo de equipaje implica decisiones en diferentes niveles de seguridad, y que las cifras reportadas por Talma no reflejan necesariamente un error en el sistema.
La situación actual plantea serias dudas sobre la capacidad del nuevo aeropuerto para manejar el volumen de pasajeros y equipaje que se espera una vez que comience a operar. La falta de un sistema de manejo de equipaje confiable podría no solo afectar la experiencia de los viajeros, sino también la reputación del aeropuerto y de las aerolíneas que operan en él.
A medida que se acerca la fecha de apertura, las autoridades y los operadores del aeropuerto enfrentan la presión de resolver estos problemas de manera urgente. La experiencia de los pasajeros dependerá en gran medida de la eficacia del sistema BHS y de la capacidad de las aerolíneas para adaptarse a cualquier inconveniente que pueda surgir.
La comunidad aeroportuaria y los viajeros estarán atentos a los desarrollos en esta situación, ya que la inauguración del nuevo terminal representa una oportunidad significativa para mejorar la conectividad y la infraestructura del país. Sin embargo, es esencial que se aborden estos problemas antes de que el aeropuerto comience a operar plenamente, para garantizar una experiencia de viaje fluida y sin contratiempos.