La selección de fútbol de Bolivia se enfrenta a un contratiempo inesperado a solo dos días de su crucial partido contra Perú en las Eliminatorias para la Copa del Mundo 2026. El Estadio Nacional de Lima, donde se llevará a cabo el encuentro, no está en condiciones óptimas para recibir a los equipos, lo que ha llevado a la escuadra altiplánica a modificar su plan de entrenamiento.
El coordinador general del equipo boliviano, Carlos Pino, expresó su sorpresa al enterarse de que el campo del Estadio Nacional aún está en proceso de reacondicionamiento. Según Pino, la comunicación sobre la prohibición de entrenar en el recinto llegó a última hora, lo que complicó la preparación del equipo. “Nos comunicaron que no podremos reconocer el campo del Nacional. El motivo es que harán trabajos durante todo el día en la cancha. Por ese motivo entrenaremos en Matute”, declaró Pino a la prensa local.
Este cambio de planes ha obligado a la selección boliviana a trasladarse al estadio Alejandro Villanueva, conocido como Matute, para realizar sus prácticas. Sin embargo, el escenario del Instituto Peruano del Deporte (IPD) tampoco estará disponible el día previo al partido, lo que significa que el equipo seguirá entrenando en la cancha de Alianza Lima.
Pino también comentó sobre el impacto que esta situación tiene en la planificación del equipo. “El estadio no está en las mejores condiciones. A nosotros nos cambia un poco el plan, porque todo fue avisado a última hora. El correo donde se suspende eso lo recibo hoy a las 5 de la tarde y entonces tocó cambiar la planificación”, explicó. A pesar de estos inconvenientes, el coordinador de Bolivia no considera que la situación sea injusta, ya que ambos equipos se ven afectados por la misma restricción.
El partido entre Perú y Bolivia es de vital importancia para ambos equipos en su búsqueda de un lugar en la próxima Copa del Mundo. La selección peruana, dirigida por Óscar Ibáñez, se encuentra en una situación crítica, ocupando el último lugar de la tabla con solo siete puntos. Necesitan sumar la mayor cantidad de puntos posible en los próximos partidos, especialmente contra Bolivia y Venezuela, para mantener vivas sus esperanzas de clasificación.
Por su parte, Bolivia llega a este encuentro en una posición más favorable, ocupando provisionalmente la séptima casilla con 13 puntos, lo que les da acceso al repechaje. Sin embargo, el equipo no se siente como favorito. “Bolivia no es favorito, no nos sentimos favoritos en nada. Venimos a hacer nuestro partido. Tenemos armas para hacer un gran partido con Perú, ellos también tienen sus armas, y será un lindo duelo de clasificatoria”, afirmó Pino, destacando la competitividad y el respeto mutuo entre ambas selecciones.
El Estadio Nacional, conocido por su capacidad y su historia, se ha convertido en un escenario clave para el fútbol peruano. Sin embargo, la falta de preparación adecuada del campo puede afectar el rendimiento de los equipos. En este caso, la situación ha llevado a que ambos equipos deban adaptarse a las circunstancias, lo que añade un nivel adicional de desafío a un partido ya de por sí complicado.
A medida que se acerca el día del partido, las expectativas crecen. Los aficionados de ambos lados esperan un encuentro emocionante que podría definir el rumbo de sus selecciones en la carrera hacia el Mundial. La presión está sobre Perú para obtener una victoria que les permita salir del fondo de la tabla, mientras que Bolivia buscará consolidar su posición y acercarse a la clasificación.
La situación en el Estadio Nacional es un recordatorio de que, en el fútbol, los imprevistos pueden surgir en cualquier momento, y la capacidad de adaptación es crucial para el éxito. La selección boliviana, a pesar de los contratiempos, se prepara para dar lo mejor de sí en un partido que promete ser intenso y lleno de emociones.